ImmunoNews

¿Profesión? ¡Asesina natural! (Guerreras NKs)

¿Qué tienen estos soldados que las hacen tan atractivas? Con ese nombre…¿son realmente tan agresivas como se sugiere? Una vez más, ¡sumérgete en el fascinante ejercito interior con el que cuentas!

¿A qué bando pertenecen estas células?

Empecemos con algo muy curioso. Tanto las guerreras NK como los soldados T y B tienen un pasado común, ya que todos provienen de una misma «madre». Como veíamos en esta entrada, tanto los soldados T como los B formaban parte del bando lento y selectivo, necesario para que las amenazas desaparecieran por completo de nuestro organismo. ¿No sería lógico pensar que los soldados NK también deberían pertenecer a este mismo bando? Pues si, sería muy normal que tuviéramos esto en mente. Sin embargo, no es así. Las guerreras NK, junto con otras células como las «unionistas» (células dendríticas) o los «glotones» (macrófagos), forman parte del bando bruto y rápido, que siempre llegaban los primeros al campo de batalla y servían como primera línea de defensa para evitar que los enemigos se expandieran.

Pertenecer a este bando supone que ninguna otra célula tiene que darte órdenes para empezar a guerrear. Esto quiere decir que las asesinas naturales pueden destruir las amenazas cuando encuentran algo que no está funcionando adecuadamente. ¿Y cómo lo hacen?

O mano presentadora, o muerte.

Todas las células de nuestro organismo tienen unas moléculas en su superficie, llamadas receptores, que les permiten responder a las señales que hay a su alrededor. Así, si alguien envía una instrucción de que un soldado tiene que proliferar, sus receptores le permitirán captar esa señal y, voilá! empezará a multiplicarse.

Las guerreras NK tienen muchísimos receptores en su superficie, y éstos pueden decirle que se calmen (¡Hey, hey, tranquiiiila!) o bien que se despierten (¡Mírame, soy peligrosa!). Son los conocidos como receptores de inhibición y activación y, aunque te vaya a sonar increíble, el que una célula NK se active o no depende de un fino equilibrio entre las señales que le llegan de los receptores de inhibición y las que provienen de los receptores de activación. ¿Complejo? ¡Por supuesto! Pero vamos a entenderlo con un ejemplo muy práctico.

Todas las células de nuestro cuerpo, tanto los guerreros como los que no forman parte del ejército interior, expresan lo que en más de una ocasión he mencionado como «mano presentadora» de tipo 1 (oficialmente llamado MHC de clase I). Por lo general, las guerreras asesinas naturales tienen un receptor de inhibición que reconoce a estas manos presentadoras. Así, en una situación normal, las células NK se acercan a una célula, le ven que todo está en orden, reciben una señal de inhibición y listo, aquí no ha pasado nada.

Portada_
Asesina natural (en azul) «hablando» con una célula tumoral. Muy seguramente le esté preguntando por su mano presentadora. Fuente

Ahora bien, algunas situaciones, como cuando ciertos virus infectan a las células o bien cuando aparecen «rebeldes» (células con capacidad para originar cánceres), resulta que esa mano presentadora se «oculta». En primer lugar, ¿sabéis por qué lo hacen? Bueno, un tipo de soldados T (los del bando de ataque rápido, o CD8) sólo pueden matar a las amenazas si contactan con esta mano presentadora en particular, por lo que los virus y rebeldes, creyéndose muy listos, piensan: «Si quitamos estas manos…¡habremos engañado a estos guerreros de pacotilla!«. Y si, tienen razón, ya que de esta forma estos soldados T se quedan «ciegos» y no pueden hacer nada.

Sin embargo, ¡no habían pensado en las asesinas naturales! En esta situación concreta, cuando los virus y rebeldes estén celebrando por todo lo alto su «increíble táctica de distracción», recibirán la visita de nuestras asesinas naturales:

Tras unas milésimas de segundo de espera, las asesinas naturales sabrían que eso que le están contando no es más que un cuento chino, por lo que sus receptores de inhibición no les dirían nada y, por consiguiente: ¡¡comienza la escabechina asesina!!

La «balanza mortal»: o me paras o te asesino

Algunas veces, las células, ya sean «indeseables» o bien trabajadoras normales pero «estresadas», no quitan esa mano presentadora. Entonces, ¿quedan protegidas frente a nuestras asesinas? Pues para su desgracia (y nuestra suerte) no.

Como ya te decía antes, las células NK tienen receptores que les dicen tanto que se queden quietecitas, como que se pongan manos a la obra. La mano presentadora es una señal muy potente que indica que se queden quietas, pero no es suficiente para contrarrestas otras señales que digan: ¡ACCIÓN, ACCIÓN, PONTE MANOS A LA OBRA!

Las células estresesadas pueden aumentar la cantidad de señales de activación y ser eliminadas por las células NKs antes de activar el interruptor de mutaciones y aumentar la probabilidad de volverse rebelde en el futuro…Fuente: adaptado de Beatrice The Biologist

Cuando las células se estresan, por ejemplo, o incluso en algunos casos muy puntuales de cánceres, se empiezan a producir una enorme cantidad de señales de activación en su superficie. ¿Cual sería el escenario si una NK se acercara en este momento?

Y como ya hemos visto en la anterior conversación, la asesina natural cumpliría las órdenes y ¡puf! «Hasta luego, Lucas», amenaza borrada.

Asesinas pero…dulces

Después de todo esto, es muy posible que estés pensando que el nombre que recibieron no fue casualidad, y que las células NK tienen por oficio natural el asesinato de las células que no se comportan como deberían. Pero…¿y si te digo que estas guerreras son las más abundantes durante el embarazo? ¡No te lleves las manos a la cabeza! Que no son peligrosas, sino todo lo contrario, son las células «más dulces» que podremos encontrar.

Algunos tipos de «asesinas naturales» se comportan más bien como «nodrizas naturales» y son indispensables para que el embarazo se desarrolle adecuadamente. Autor de la imagen: Binqing Fu

¿Qué como es esto? Bueno, resulta que existen varios tipos de asesinas naturales: de las que hemos hablado, que suelen estar circulando por nuestra sangre en todo momento y son posteriormente reclutadas cuando se las necesitan; y otras, las que encontramos en el útero, que son indispensables para que el embarazo vaya bien y haya ningún problema durante la gestación. Aunque ambas guerreras son NKs, muchos de los que investigan con estas «asesinas uterinas» han comentado que aquí el nombre no les haces justicia y puede llevar a malentendidos. Un estudio muy reciente ha demostrado que las NKs uterinas son las encargadas de producir los «nutrientes» necesarios para que «el feto crezca adecuadamente». Así, su función sería más bien la de servir como «madre nodriza» que la de asesinar a los invasores, por lo que igual podríamos llamarlas como «nodrizas naturales».

Sin duda alguna, las guerreras asesinas naturales son uno de los soldados más enigmáticos de nuestro ejército interior, ya que aún hoy día se desconoce exactamente el funcionamiento de esa «balanza mortal». Ya que la entrada iba a ser demasiado larga, no he podido hablaros del fascinante y curioso «entrenamiento» que reciben y que les permiten «licenciarse» o «no licenciarse»; tampoco he podido hablaros sobre su potencial en la lucha contra el cáncer, o incluso su papel en las enfermedades autoinmunitarias. Si te has quedado con ganas de más, no dudes en hacérmelo saber para crear en el futuro una segunda entrada sobre estas guerreras. ¡Ellas estarán encantadas de recibir tanto protagonismo!

CRÉDITOS

Foto de portada: http://www.cbi.pitt.edu/UPCI/index.html

+Referencias:

Salir de la versión móvil